Para
llegar al comienzo de la ruta, saldremos desde el centro de Asturias
por la autovía A-66 en dirección a Gijón y pasar después a la A-8 hacia
Galicia. La dejamos en la salida 421 y seguimos por la AS-16 hacia
Pravia. Pasado el pueblo de Peñaullán, en la primera rotonda que encontramos nos vamos a la derecha, para llegar en un momento a Agones. En mitad del pueblo, nos vamos a la izquierda, siguiendo las indicaciones, para llegar a las instalaciones deportivas, donde tenemos amplios aparcamientos.
A la entrada de las buenas y amplias instalaciones deportivas, tenemos un panel de la Ruta de los Marineros, que nosotros seguiremos en parte, para ampliarla con otros caminos.
Comenzamos a caminar en dirección oeste, siguiendo la carretera que nos trajo hasta aquí.
Después de un rato, en una curva a la derecha, dejamos la carretera y nos adentramos en el bosque, siguiendo de frente, por una pista de tierra que comienza a empinarse.
El camino es bueno y llevamos siempre a nuestra izquierda el río Aranguín, cada vez más bajo, mientras cruzamos arroyos que le buscan para unirse a él.
Llegamos a una bifurcación donde una flecha nos indica que si vamos a la izquierda llegaremos a Pravia en menos de 4 kilómetros, pero como nos parece que es muy pronto y llevamos menos de 3 kilómetros, nos vamos a la derecha, dejando la ruta de los marineros que retomaremos más tarde según vemos en el mapa.
Siempre en subida, encontraremos varios posibles desvíos, pero nosotros seguimos por la pista principal en busca del pueblo de Escoredo.
Llegamos al lugar de Los Llanos, con buenas casas y otras que están siendo rehabilitadas y seguimos hasta entroncar con la carretera que procede de Agones.
Ya vemos el pueblo de Escoredo por encima de nosotros y hacia él nos dirigimos por la carretera.
A la entrada del pueblo, nos detenemos para contemplar las magníficas vistas del entorno, aunque el sol no nos deja hacer fotografías medianamente claras.
Pravia |
A la entrada, vemos el palacio de Cuervo y Miranda del siglo XVIII (foto de portada de esta entrada), así como la iglesia de Santiago a la que no llegaremos, puesto que hemos de desviarnos antes.
Casi al final del pueblo, nos vamos a la izquierda para tomar una estrecha carretera, que pronto se inclina hacia abajo, para ir en busca de Villarigán.
Villarigán |
Villarigán es un pueblo grande que pertenece a la parroquia de Escoredo y tiene una capilla destinada a Santa Anina.
Capilla de Santa Anina |
Al final del pueblo, vamos distraídos y comentando lo poco amigas que somos las cabras y nosotros, y pasamos de largo por el lugar donde se encuentra el cartel con el nombre del pueblo, por lo que hemos de retroceder para entrar en una pista de tierra que se sigue por un bosque de eucaliptos.
La pista es buena pero tiene muchos restos de las roturas de árboles de anteriores tormentas y es siempre en bajada con fuertes tramos, pero muy agradable de caminar.
Llegamos al pueblo de Cañedo y volvemos a encontrarnos con el río Aranguín y con la ruta de los Marineros que habíamos dejado hace tiempo.
Un tramo de carretera y llegamos al pueblo de Agones para dirigirnos al lugar donde tenemos nuestro coche y finalizar así esta ruta de hoy.
Agones |
Casa de Meras, también conocida como Casa de Fernández de la Vega |
Instalaciones deportivas |
La ruta en el mapa del IGN |
Perfil de la ruta |
Han sido 14,2 kilómetros en 4 horas y 38 minutos
Ganancia en altitud 484 / -484 metros.
Pendiente máxima 40,1 / -32,1 %
Pendiente media 7,7 / -7,1 %
Tiempo en movimiento 3 horas y 57 minutos.
Altura máxima y mínima 308 / 8 metros
Hicimos la ruta el 23 de febrero de 2021
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