Estamos en Matalascañas (Huelva) y la ocasión es inmejorable para caminar por Doñana.
Son muchos los senderos señalizados pero nosotros elegimos cuatro para caminar y conocer el Parque.
Hay que distinguir entre Parque Nacional, al que solo se puede acceder con alguna de las empresas autorizadas, y Parque Natural por el que podemos circular libremente, pero sin salirnos de los senderos señalizados.
A cinco kilómetros de Matalascañas, por la carretera de El Rocío, vamos al Centro de Visitantes El Acebuche donde veremos unos audiovisuales y posteriormente haremos la ruta señalizada que parte del mismo centro.
Siempre por pasarelas de madera nos dirigimos a la zona de La Laguna del Acebuche.
Vamos pasando por varias cabañas habilitadas como observatorio de aves, aunque hay que reconocer que aves vemos muy pocas.
Es importante la vegetación que nos ofrece múltiples plantas, muchas de ellas aromáticas como el Cantueso (lavandula stoechas) muy utilizada en perfumería o farmacia, así como otras tales como el tomillo, romero, jaras, etc.
Entre los árboles, abundan enormemente los pinos piñoneros y vemos el acebuche que no es otro que el olivo silvestre.
Acebuche |
Volvemos hacia el principio de la senda para caminar ahora al oeste en busca de la Laguna de Las Pajas.
En el camino nos encontramos con una antigua máquina que servía para sacar los piñones de las piñas.
Y, casi a continuación, un gran alambique que se utilizaba para sacar los aceites y perfumes de las plantas.
Distintos observatorios con avistamientos fallidos, y el paso por una gran zona de plantas aromáticas de varios tipos, para retornar definitivamente al Centro de Visitantes.
Centro de Visitantes del Acebuche |
La ruta en el mapa del IGN |
Han sido poco más de cinco kilómetros y medio, muy sencillos con el único inconveniente de los mosquitos que se ceban con nosotros.
RUTA DEL ACEBRÓN
Por la misma carretera de El Rocío, nos encontramos con el Centro de Visitantes de La Rocina y, desde él continuamos varios kilómetros por una carretera interior de Doñana en busca del Palacio del Acebrón.
La ruta comienza en el palacio, pero desde el aparcamiento ya comenzamos a caminar y desde aquí lo tendremos en cuenta.
Pasamos la portada principal que da a los jardines del palacio y pronto nos adentramos en él, donde se encuentra una magnífica exposición de todo lo relativo a Doñana, como los antiguos oficios, las labores, etc.
Palacio del Acebrón |
Desde la terraza del tejado, las vistas del Parque de Doñana son extraordinarias.
Salimos del edificio y vemos el panel explicativo del sendero que vamos a hacer.
Como casi siempre en Doñana, la senda discurre por entarimado de madera.
En pocos pasos llegamos al lago llamado Charco del Acebrón.
Encontramos el único lugar sin pasarelas de madera.
Leemos en uno paneles que, cuando se extendió la fiebre de los eucaliptos, también se plantaron una buena cantidad en este lugar, ahora solo hemos podido ver dos ejemplares de dos troncos cada uno.
Continuamos la marcha y llegamos a una zona de alcornoques donde podemos contemplar de cerca sus magníficas cortezas de corcho.
Y una gran extensión de helechos hacen que recordemos algunas de nuestras rutas en Asturias.
Llegamos al aparcamiento y damos por finalizada esta bonita ruta de poco más de 2 kilómetros.
RUTA DE CUESTA MANELI
Aproximadamente, en el kilómetro 40 de la carretera de Matalascañas a Huelva, nos encontramos con un gran aparcamiento donde comienza la Pasarela de la Cuesta de Maneli.
Es una pequeña ruta entre dunas y pinos piñoneros, que nos llevará hasta el mar y alguna sorpresa.
El paseo es bonito y tranquilo y, en un panel se nos indica que observemos algunos pinos que se encuentran bastante inclinados como consecuencia de sufrir durante años la fuerza de los vientos del suroeste hasta quedar algunos paralelos al suelo.
Esta es la explicación científica, pero a mi me gusta más la que indica Sara en su delicioso blog de MOMENTOS DECISIVOS, y es que los árboles "cuando llega la noche se inclinan y duermen".
Continuamos y al llegar a la playa nos encontramos en unas dunas fósiles que ha ido formando el viento al arrojar con fuerza la arena durante uno 15.000 años, que al chocar con los árboles forman el Acantilado del Asperillo con considerable altura.
Una vez admirado este monumento natural, nos apena ver a sus pies otro monumento, fruto de la mano del hombre, en forma de plásticos, vidrios y demás basuras.
Esta última observación no consigue distraernos del objetivo principal que son las dunas y el bonito acantilado.
La ruta en el mapa del IGN |
RUTA DEL CHARCO DE LA BOCA
Habíamos pasado sin detenernos por el Centro de Visitantes de La Rocina, para llegar al Palacio del Acebrón, pero ahora haremos otra de las rutas de Doñana desde este lugar.
Comenzamos visitando una recreación de las antiguas cabañas de las marismas, y comprobamos que, son más grandes pero tienen bastantes similitudes con nuestras cabañas de pastores en las montañas.
Pronto llegamos al Charco de la Boca donde avistamos algunas aves en la distancia pero como no tenemos el material preciso, nos quedamos con las ganas de identificarlas.
Charco de la Boca |
Continuamos por las pasarelas, con idéntica suerte respecto a los avistamientos y hemos de conformarnos con la vegetación propia de las marismas.
Nos llama la atención ver que en distintos lugares encontramos señales con el nombre de "algaida". ( Algaida del Carrizal). Posteriormente leemos que en Andalucía se conocen con el nombres de Algaidas los lugares cubiertos con espeso matorral, que en este lugar las especies viven en el suelo inundado por el arroyo de La Rocina, y podemos encontrar zarzaparrillas, madreselvas, correhuelas, etc.
Y, tras el recorrido, volvemos al Centro de Visitantes de La Rocina, pero no ponemos el final ya que continuamos un poco más para acercarnos a ver las Marismas del Rocio, donde vemos a lo lejos otro tipo de aves y los famosos caballos de la zona.
Centro de Visitantes de La Rocina |
Marismas y pueblo de El Rocío |
Han sido unos cinco kilómetros de tranquilo paseo.
Estas rutas anteriores, han sido por nuestra cuenta dentro de la zona de Parque Natural. Posteriormente hicimos otra ruta por el Parque Nacional, pagada, con guia y en vehículo todoterreno, por la playa y las dunas, de la que solo pongo el mapa, ya que no la consideramos ruta de senderismo.
Son unas cuatro horas y la experiencia merece la pena.
RUTA GUIADA POR EL PARQUE NACIONAL
Guapas rutas para conocer Doñana las que habeis hecho, yo que llevo dos años veraneando en Huelva y quieres creer que no me acerque a Doñana, mi costilla es de asfalto y le gusta mas la playa y las tiendas de Vilareal de Santoantonioasi que no hay manera. Los mosquitos si que son un problema, pero al menos te evitas las garrapatas de Asturias jeje.
ResponderEliminarGuapo reportaje y fotos Jose Manuel.
Un Saludo.