Para
llegar al comienzo de la ruta, saldremos desde el centro de Asturias
por la autovía A-66 en dirección a León, para abandonarla en Olloniego y
continuar por la AS-244 hasta Langreo donde seguiremos por la AS-117
hasta Rioseco en el concejo de Sobrescobio.
Cuando hace unos días hicimos la ruta de la Calzada Romana de Sobrescobio, nos encontramos con otra ruta que desconocíamos por completo y que decidimos hacer en la primera ocasión posible.
Tengo la mañana disponible y hacia Rioseco que me voy.
Aparco en la biblioteca que es donde se encuentra el panel de comienzo de la ruta.
El Ayuntamiento de Sobrescobio está recuperando rutas sencillas y bonitas como esta que sirve para recordar el paso de los romanos hace 2000 años, posteriormente los peregrinos a Santiago que desde León venían a Oviedo para rendir culto al Salvador y más recientemente para el intercambio del comercio con León.
Biblioteca de Rioseco |
Para comenzar, cruzamos la carretera y pasamos a la parte de atrás del pueblo guiados por las flechas del Camín de Acéu.
Nos enfrentamos a un camino, con bastante pendiente, que en su primera parte es de adoquines y hormigón, y posteriormente de tierra.
Se llega a una parte llana, (más adelante diré el nombre del lugar), donde se encuentran la actual ruta y la de la calzada romana y seguirán siendo coincidentes durante unos cientos de metros.
Calzada romana |
Tomamos un desvío a la derecha, debidamente señalizado, y continuamos en llano por la primitiva calzada mientras observamos el lugar del que extraían la piedra y un panel nos explica el proceso de creación de la calzada.
Finalizada la parte más aérea, atravesamos una portilla y entramos en una zona de arbolado, ya con ligero descenso.
Entramos y atravesamos un buen bosque de castaños de buen porte, pero sin llegar a los que veremos si hacemos La Ruta de Los Cabornos en este mismo concejo.
El final del bosque llega cuando nos encontramos con una pista de hormigón que nos ofrece tres posibilidades: bajar en pocos metros a la carretera AS-117 y volver por ella A Rioseco, seguir al frente hacia El Lugar de los Infiernos, pero no podemos ya que está cerrado con palos y cuerdas, y optamos por subir hacia la Calzada Romana.
Estamos en Anzó.
Se trata de una subida corta pero con bastante pendiente hecha de hormigón, que llega a un depósito de agua.
Nos vamos hacia abajo, estando ya en la calzada romana.
Cuyargayos y Retriñón |
Llegamos al Peñón del Caspiu donde sendas placas, nos avisan de enterramientos de un pasado triste.
Peñón del Caspiu |
Cogollu, Escrita, entre otros, con un buen ejemplar de torre delante. |
Seguimos bajando hasta llegar al cruce de caminos de las dos rutas, y ahora continuamos la bajada por la izquierda en dirección a Rioseco.
Acéu |
Rioseco |
En lugar de dirigirme a la biblioteca, que se encuentra al lado, voy a la Casa del Agua que también es oficina de turismo, para tratar de aclarar porque la ruta de llama Camín de Acéu.
Así me entero que Acéu es la zona llana de pastos donde se juntan las dos rutas, y cuyo nombre desconocía cuando llegué en la subida.
Casa del Agua |
Iglesia de Rioseco |
Una buena clara de limón, que el cuerpo reclama por el caluroso día, y a comer a casa.
La ruta en el mapa del IGN |
Perfil de la ruta |
Han sido 5,64 kilómetros en 1 hora y 57 minutos.
Ganancia en altitud 261 metros.
Pendiente máxima 53,9 %
Pendiente media 13,9 %
La ruta se hizo el día 17 de julio de 2015.
Precioso recorrido que te copiaremos para hacer con Silvia cualquier ratín . Gracias José Manuel
ResponderEliminarEs una ruta muy sencilla y bonita y, por ser pequeña, válida para cuando solo se tiene un rato o para acompañar con otra, como por ejemplo la de Los Cabornos que también está muy bien.
EliminarUn saludo